Watchmen, pero el cómic

Cuando escribí la entrada sobre mis impresiones tras ver la película de Watchmen había mencionado que no había tenido el gusto de haber leído el cómic antes de haber visto la película pero que ésta última me había gustado mucho, y algunos de sus comentarios decían que me leyera el cómic, cosa que creía hasta hace unas semanas imposibles porque cada número está caro y aparte no los venden aquí, así que tendría que transportarme para conseguirlos, pero afortunadamente mi hermana me mencionó un par de métodos para descargar la serie entera, cosa que me alegro mucho al ver lo fácil que fue y ya con los bytes asentados en mi disco duro me disponía a disfrutar uno de los mejores cómics de la historia.
Aunque no quiero despejar mucho del cómic, una de las cosas que se pueden destacar son sus diferentes lecturas, es decir, es una dura crítica hacia el capitalismo, los métodos de gobierno, la guerra y la misma humanidad por medio de superhéroes que a diferencia de sus similares como Superman o Batman, estos no eran más que personas más ágiles que los demás y que combatían el crimen con sus habilidades (claro exceptuando al Dr. Manhattan), pero cada uno tenía una visión diferente de la realidad.

Cada uno tiene sus ideas políticas y sociales y las plasma claramente de la mano de Alan Moore y los dibujos de Dave Gibbons, primeramente estaba Adrian (o Ozymandias) un hombre pacifista, creyente de la humanidad y hombre obsesionado con la cultura egipcia, a pesar de ver la violencia con malos ojos, sus medios para llegar a la tan adorada paz no eran los mejores a la vista de nadie. Tanto Silk Spectre como Nite Owl eran personas parecidas a Adrian, más apolíticos, tratando olvidar su anterior vida pero los tres personajes más interesantes son el Dr. Manhattan, súperhombre que tiene una definición muy diferente del tiempo a como toda la humanidad, desinteresado en la horrible forma de actuar de los humanos y mayormente interesado en sí mismo, en su tranquilidad aunque eso signifique estar alejado de la Tierra, por supuesto Rorscharch, hombre que tras sufrir mucho en su infancia es mandado a una casa de refugio donde se desarrolla perfectamente, hasta que se acerca a los Watchmen para combatir el crimen pero le toca ver lo peor de la gente, experimentar los peores crímenes y revivir los horribles fantasmas de su pasado, además de una posición ultraderechista influenciado por su oscura forma de ver la vida, algo parecido en alguna forma a The Comedian, hombre que ya ha entendido a la humanidad, se ha dado cuenta de que la sociedad se revuelca en sus mismos problemas por toda la eternidad y todo lo considera una gran broma, que es lo único que posiblemente lo aleje de la terrible realidad que viven.


Como en la película todo empieza con la muerte del Comediante y su posterior investigación por parte de Rorscharch, pero eso es lo que menos interesa al cómic porque en las más de 400 páginas de este profundiza mucho más en los personajes, en su evolución, pensamientos y la historia central avanza más bien poco, principalmente porque todas las respuestas nos las dan en los dos números finales, por medio de flashbacks vamos conociendo los claroscuros de estos héroes peculiares, desde su iniciación, sus ideas hasta su posterior prohibición en 1977 lo que provoca que todos se recluyan en unas vacaciones imprevistas, y para no ser detenidos por la polícia y esto lo hace muy interesante porque a pesar de que todo eso de la destrucción del planeta no toma parte importante en el cómic, los personajes son bastante moldeados a partir de la realidad y es realmente novedoso encontrarnos con modalidades (como los flashbacks) que parecían más de la industria televisiva sean usadas en Watchmen (el cómic), además de esa interesantísima historia paralela a la principal, sobre el naufrágo que explica más las acciones de la sociedad, además de esos "suplementos" donde agregan un poco más de condimentos a la historia, como son entrevistas, artículos, fragmentos de libros, fotografías y hasta publicidad que hacen entender más la naturaleza de los personajes.


Ahora hablemos de la película, a pesar que el cómic mismo podría considerarse en algunas partes inadaptable e incluso lo es, Zack Snyder ha realizado un buen trabajo, tal vez no en adaptación porque prácticamente ha calcado el cómic en lenguaje de cine pero creo que ha sido la elección más segura, porque si la hubieran distorsionado como casi todo lo que hacen ahora nos hubieramos quedado con peor sabor de boca, aunque yo particularmente me quedo tanto con el cómic como con la película porque secuencias que fueron sorprendentes en papel, con los efectos de cine fueron muy buenas, tal vez pueden acusarla de muy lenta, de que en mostrar a los personajes se le va todo el tiempo y puede hacerse eterna pero a pesar de que se han quedado corto con la crítica durísima de Moore y la evolución de los personajes y la narración no se me hizo para nada pesada, de hecho me gustó más que la sobrevaloradísima de Batman: The Dark Knight y es que ninguna película de superhéroes en particular me ha gustado, y con esta agregando puntos a favor como ese interesante retrato de una realidad ficticia en los 80 le han dado un factor muy superior a otros trabajos de este tipo. Las actuaciones bastante aceptables y como digo, los efectos perfectos.
Tal vez muchos acusen que es demasiado fiel pero como nunca dejarán contentos a los fans más aferrados, pues creo que la versión de Snyder se queda bien parada y tengo muchas ganas de esa versión extendida que serán las pocas partes del cómic que se quedaron fuera de la versión comercial de la película. Y sobre su final creo que fue acertado, principalmente porque era bastante díficil (y lo caro) que resultaría adaptar el verdadero final en el cómic aunque estén tranquilos que no está muy alejado, de hecho tiene un muy pequeño cambio.


Watchmen, buen inicio para mí en cuanto a cómics se refiere porque no había pasado de las tiras cómicas del periódico, pero ha sido una lectura muy grata y si tienen la oportunidad, recomendable y mucho más para entender la película.