Más allá de aquí nada miente

Ese sería más o menos la traducción del nombre del final de la segunda temporada, tan buena como bizarra, tan incipiente como deliciosa, True Blood definitivamente nos hizo ver de todo durante 12 episodios que terminaron de la única forma que podíamos esperar: muy raro y como dicen que lo raro es amigo de lo feo significa que no, Beyond Here Lies Nothin' no me gustó.

Es curioso pero justamente hace un año cuando terminaba su primera temporada hizo poco ruido con la blogosfera, de hecho no recuerdo a nadie que la llevara a ritmo USA, yo la terminé hasta marzo pero ahora con la segunda temporada que repercutió muchísimo más todos hablan de ella, y no es para menos encontrarse con una de las series más extrañas de los últimos años.

Tal vez encuentres spoilers de toda la temporada pero procuraré no soltar mucho

Después de un excelente final de temporada, la serie nos dejó en vilo por saber quién era el que estaba en el auto del detective Bellefleur y para suerte de nosotros no era quién pensabámos porque hubiera sido fatal, ya que Lafayette es una parte importante de una serie con personajes con los que es difícil simpatizar, esta segunda etapa no podía empezar de mejor manera, con resolviendo el final y además incluyendo mucho más misterio lo que le dio muchos puntos extras, además de que tener a Michelle Forbes era magnífico, pronto las cosas se acomodaron, Bill y Sookie en Dallas mientras que Maryann mostraba su verdadero rostro, pero eso poco a poco.

Creo que lo más interesante de la temporada pasaba en Dallas, con la trama primero para la desaparición de Godric y todo lo de la Hermandad de la Luz, y es allí donde fue la prioridad de la serie, ya que lo que pasaba en Bon Temps importaba, pero poco, de hecho las mayores emociones fueron fuera del pueblito de Louisiana, además de que tuvimos grandes momentos con Eric que se dejó ver más y con ello se convirtió en uno de los mejores personajes de la serie, ya que el actor lo borda de manera magnífica, malo es que los demás sean un tanto sosos.

La temporada no podemos negar empezó fuerte contando con que la primera temporada costó mucho despegar, pero fue en el momento de dejar Dallas que la serie se perdió, estabamos acostumbrados a cierto grado de rareza pero con definidas dosis, de regreso a Bon Temps la serie explotó ese lado rarísimo, nos quedamos atónitos ante semejante cantidad de asquerosidades donde lo unico que se salvaba era Maryann, con un 2x10 bastante penoso, aunque el siguiente llegó a interesar terminamos en un final aburrido, más accidentado aun, eso sí con la ventaja de la aparición de la "Reina" con una aceptable actuación de la enorme Evan Rachel Wood, lo poco que se salvó.

Poco a poco se volvió a la normalidad y mientras que en el final anterior nos dejaron con la boca abierta, esta vez su amarre para la siguiente temporada importa poco, sabemos que los cliffhangers son engañosos pero éste importa mucho menos.

Decepcionante final, pero es como debía terminar porque no me imaginaba de que otra manera podían concluir con todo lo que habíamos visto, raro raro raro