Perdón a Terrence Winter

Después de terminar la gloriosa segunda temporada de Boardwalk Empire realmente considero que debo de pedir una disculpa a Terrence Winter y a HBO por haber dudado de ellos y de esta serie, que ha alcanzado niveles de espectacularidad, fascinación, y aunque claro que una serie perfecta no puede existir pero al menos se acerca al olimpo de las series a las que posiblemente siempre ha pertenecido, y es que siendo sinceros la primera temporada fue agridulce, no terminó de convencernos en el sentido de que era fría, bastante lenta en los primeros episodios (a excepción del soberbio primer capítulo) y que tenía esa estela de perfección cuando una historia como la que se cuenta en esta serie necesita es hacer bajar a los infiernos a sus personajes y mostrarnos lo peor de ellos, y vaya que lo han hecho, al grado de que he terminando odiando a Nucky cuando por ejemplo Tony de Los Sopranos a pesar de ser de los personajes más bajos de la televisión reciente siempre se ponía uno de su parte (con sus excepciones pero al final se le perdonaba) pero es que lo que hicieron los guionistas es demostrar que sus personajes no andan con miramientos, ni ellos tampoco.

A PARTIR DE AQUÍ SPOILERS:

Como acertadamente dijo me parece que Alberto Rey de Asesino en Serie, esta temporada fue de Jimmy (Michael Pitt) que se convirtió en amplio protagonista de la mayoría de las tramas y además se profundizó en su dolorosa vida y su pasado y mucho más oscuro presente y posiblemente es lo que haya dado ese aire de grandeza que consiguió en esta segunda temporada, ya que este personaje fue construido de manera magnífica aunque sin embargo no terminamos de comprender sus decisiones pero sucedía que su carisma era abrumador que todo se le perdonaba.

Pero esta serie se convirtió en una tragedia, todos los personajes experimentaron durante los 12 episodios de esta temporada de diferentes desgracias que terminaban por ponerlos contra las cuerdas e incluso conseguir que los más bajos instintos afloraran, con contradicciones y mucha violencia conocimos caras jamás esperadas como por ejemplo cuando Jimmy ordena la muerte de Nucky y que es lo que finalmente termina por marcar su destino tan trágico.

Nucky en esta temporada se vio completamente presionado por la acusación más aparte la presión de sus enemigos que terminó salvándose por muy poco y es que sin duda que los guionistas se lo pusieron difícil a este personaje, ya que cuando terminaba de salir de un problema entraba en otro probablemente más grande que el anterior, aunque lo que se agradece es que por fin muestre ese lado tan oscuro que ocultó por la primera temporada, en ésta fue cruel, despiadado y voraz y que no le importa si se case por el simple hecho de hacer callar a Margaret.

La otra gran protagonista fue ella, que sin embargo fue la que más bandazos dio, realizando actos cada vez más reprobables para su moral y que la llevarían a una trama que sigue sin terminar de convencerme, ya que ella (que yo la tomaba como una mujer inteligente y moderna) siente que Dios está castigando sus actos porque su hija Grace tiene polio y termina por convencerse que tiene que dar todo lo que ha conseguido al lado de Nucky, al grado de querer entregarlo.

De ahí pasamos a secundarios que provocaron situaciones que las llevaron al límite, con consecuencias insospechadas, más que nada con la madre de Jimmy que probablemente es una de las peores madres televisivas.

Principalmente la esfera de Jimmy que sin duda es la que más afectada salió de todo, como decía, una tragedia, porque si algo demostró Boardwalk Empire esta temporada es que no le importa acabar con medio cast, cuando alguien tiene que morir lo hace sin miramientos, y con lujo de gran violencia, pero sin seguir extendiendo nos encontramos con su explosivo final que es lo que termina por consolidar a Nucky como un Walter White de cabo y rabo.

La muerte de Jimmy es posiblemente uno de los finales más sorprendentes de los últimos años, más que nada porque siendo prácticamente el protagonista sinceramente no se esperaba que esto sucediera tan rápido y coloca a Nucky como un ser abyecto y voraz de poder como nunca antes se había visto, el discurso final es fuerte y bastante duro que deja en claro que con él no se juega.

FIN SPOILERS

Por ello Boardwalk Empire es sin duda la revelación del 2011 y que supera con creces las expectativas que se tenían de ella que aunque eran altas no se esperaba que se convirtiera en una de las mejores series de la actualidad y que en mi top 5 del 2011 (aún sin terminar la primera temporada de Homeland con la que se disputa el lugar) ocupa el primer lugar completamente merecido.